El ritmo del tiempo
…es a veces con armonía y otras no; depende de las emociones que uno vive, y de los latidos que nos da el corazón.
La armonía es el ritmo del espacio y el ritmo la armonía del tiempo. Según sea la velocidad el tiempo transcurre y se va acelerando o ralentizado. Como el día y la noche se suceden los claroscuros porque todo es polar y todo tiene vibración.
Dicen que “se nos muere”, aunque yo no lo miro así sino como un descubrimiento en que cada instante es distinto y vive a su manera serpenteando en llano o en cuestas acelerando o frenando en cada presente fluyendo hacia el futuro.
Majestuoso algunas veces cuando va veloz y tedioso cuando pasa lentamente. Las esperas son desesperantes y entonces hay que armarse de paciencia; porque por muy larga que sea la noche siempre pasa.
Así el tiempo va jugando con el ser, discurriendo por caminos más o menos accidentados contaminados o hermosos, como esa agua aprisionada en forma de hielo de las altas cumbres de Los Pirineos que cuando se descongelan en primavera con los rayos del sol y salen de su cárcel de hielo convirtiéndose en agua que baja veloz en forma de torrentes hasta que alcanza el valle y se amansa, para descansar un tiempo hasta que se junta con el río para ir a morir al mar y formar parte de ese espíritu como los seres humanos habremos un día de terminar con nuestro tiempo en este viaje por el mundo actual para llegar a ese fin que sólo Dios sabe lo que luego ocurrirá.
Yo lo único que he aprendido es que cada vez soy más consciente de mi ignorancia y que estoy seguro que el tiempo juega a mi favor – como dijo la historiadora Carmen Iglesias – y si sé esperar será muy favorable.
Hoy, día de San Valentín sale el sol después de meses lluviosos, y se asoma así La Primavera, aunque aún nos regale algún que otro remojón en esta tierra sedienta del sureste de España donde a pesar de sus cosas me gusta vivir ¡eso sí! con los caprichos del tiempo.
Cada dia tus articulos mejoran como los vinos con sus años. Acabo de releerlo,las fotografias acordes co el texto. Un abrazo
Gerardo Mora
Que bonito Valentin….