«Noticia Destacada»: Nuevos Estatutos del Consejo General de Colegios Farmacéuticos (CGCOF)

El Poder

Todos sabemos, lo importante que son unos Estatutos, pues son los pilares que sostienen nuestra convivencia. Unas columnas que estamos presenciando cómo en el Parlamento español las están agrietando los numerosos partidos, con alto riesgo para que el edificio de la democracia se derrumbe.

¿Hay que reforzar la democracia? ¡Sí! pienso, ¡pero en sus bases morales! porque digan lo que digan (la mayoría de los medios – subvencionados -) no la hay. ¿Alguien en su sano juicio puede dudar de la inmoralidad democrática de Sánchez o Pumpido? ¿o de la inconstitucionalidad de la amnistía? Hay que regenerar <No la democracia, sino la moralidad corrupta de esos sujetos> capaces de «retorcer Las Leyes», promocionando la deshonestidad, y la falta de rigor con la verdad y La Justicia, como poner caducidad a delitos probados para indultarlos como el caso de los ERE por ejemplo. Estamos hartos de trolas y relativismos.

El CGCOF saca unos Nuevos Estatutos. Una oportunidad para mejorar y dar ejemplo a otras instituciones donde los valores como la transparencia la democracia y la honestidad son su insignia; y de paso, arreglar bien nuestro futuro (que eso nos interesa a todos), porque es donde nos toca vivir.

Es cierto que siempre hubo <una tendencia de los Presidentes a «no dejar el sillón»>, por eso siempre he escrito, que <la renovación es necesaria>. A casi todos, se les llena la boca con «primero los interés generales», pero es sólo al principio. Después se olvidan. Y aquello, sólo quedó en un gesto vacío de contenido. La democracia interna no se ha respetado, y prueba de ello es mi artículo de la aprobación de los estatutos colegiales de Murcia como escribí el 30/3/05 en la página 228 del libro <Píldoras y Posdatas> donde hubo 118 votantes de unos 1.300 colegiados (es decir que sólo votó el 9%) y con sólo 68 votos a favor ; es decir el 5,2 %. No creo necesario hacer más comentarios.

Más tarde, en el otro libro que publiqué de <Artículos con posdata> al hacer referencia en la página 204 a los mismos, para mantener los valores de la transparencia de la libertad y la ética, escribí («en verso») esta posdata: La tierra sedienta agradece el agua/ como la libertad de expresión una democracia/ son regalos del cielo la libertad y el agua/ porque el sol y la luna también son cosas de Dios.

 «Ahora se escucha mejor el ronroneo en el mundo boticario, que en baja frecuencia viene escuchándose desde hace ya mucho tiempo, acerca de la renovación de Estatutos del Consejo General de Colegios, por unos más modernos y más democráticos», escribía en el comienzo de mi artículo anterior, hace dos semanas.

Datan del año 1957, aunque se hicieron reformas obligadas por las leyes y otras varias. Ya es hora de cambiarlos, y aprovechar la oportunidad para actualizarlos; y es por ello que el compañero Enrique Granda hace unas ALEGACIONES, y propone «la Necesidad Inaplazable de Firmar un Manifiesto».

Esta Tribunajirafa.com (que es independiente porque no admite subvenciones) se creó, con el fin de tratar los asuntos más importantes de La Profesión; y así lleva ya 25 años. ¡He aquí uno de ellos!

MANIFIESTO A FAVOR DE UN CONSEJO GENERAL
DEMOCRÁTICO Y TRANSPARENTE (E. Granda)
De los abajo firmantes, colegiados en los 52 colegios oficiales de farmacéuticos de España, sobre el último borrador
del Proyecto de Real Decreto por el que se aprueban los Estatutos del Consejo General de Colegios Oficiales de
Farmacéuticos de España (CGCOF en adelante):
Primero. Este proyecto de Estatutos diseña un Consejo
General con graves deficiencias en cuanto a su estructura
democrática: participación, transparencia, equidad y
equilibrio que deben regir cualquier norma que
obligatoriamente -detalle esencial-, pretenda organizar y
defender los derechos e intereses de sus colegiados.
Segundo. La representación de los colegiados –base para
una toma de decisiones responsable–, no está garantizada,
al aplicarse un sistema de votación en la Asamblea General,
ponderado para los Colegios mediante un cálculo absurdo
(décima parte de la raíz cuadrada del número de
colegiados), injusto y parcial para la inmensa mayoría
de los colegiados. En la Asamblea General, el valor del
voto de un Colegio provincial es hasta 150 veces superior
que el de otro.
Tercero. La nueva redacción conserva la opacidad y falta de
transparencia de los Estatutos del año 1957, casi setenta
años después. Y esto es inaceptable porque el CGCOF no
es una empresa privada o una asociación a la que los
farmacéuticos pueden adscribirse libremente.
Cuarto. El art. 36 de la Constitución sólo impone dos
limitaciones a las organizaciones colegiales: que tengan una
estructura interna y un funcionamiento democrático. Ninguna
se cumple en este proyecto de Estatutos: la estructura
interna no es democrática y su funcionamiento
tampoco. No hay proporcionalidad en las votaciones, el
Pleno del Comité de Dirección asume competencias de la
Asamblea General y a los Presidentes de Colegios se
les impone la obligación de no informar a sus
colegiados, al exigir el secreto de las deliberaciones
no sólo al Comité de Dirección, sino también a la
Asamblea General, cuyas sesiones deberían transmitirse
en directo para que pudieran informarse todos los
farmacéuticos colegiados de lo que allí se decide.
Quinto. El CGCOF no es una asociación a los efectos del
artículo 22 de la Constitución, sino una Corporación de
Derecho público, además de sostenimiento obligatorio
para los farmacéuticos colegiados, que ejerce funciones
públicas -de deontología y ordenación de la profesión- y que,
con sus decisiones, tiene la capacidad de limitar los derechos
de los profesionales. Es exigible que una institución capaz de
limitar derechos y libertades de sus miembros e imponerles
obligaciones, no solo económicas sino también que
restringen su libertad de decisión, respete al menos el
derecho de los mismos a disponer individualmente de
una información completa, veraz y no sesgada con la
que tomar decisiones. De lo contrario, la utilidad del voto
queda cercenada de raíz y la democracia desaparece.
Séptimo. Este proyecto de Estatutos no regula el
procedimiento por el que se elige al presidente y demás
miembros del Comité de Dirección del Consejo. Queda
pendiente de desarrollo reglamentario, dejando en manos de
la actual cúpula del CGCOF el diseño de un sistema electoral
que -si así lo desean- les podría permitir perpetuarse en el
poder casi indefinidamente. A juicio de los farmacéuticos que
firmamos este Manifiesto, el Presidente y el resto de
miembros del Comité de Dirección del Consejo deben
elegirse – ya que la Ley de Colegios Profesionales no permite
que sean los colegiados de toda España los que voten
directamente a su Presidente- por mediación de los
Presidentes de los Colegios, en elecciones convocadas por el
Pleno, con el voto de cada colegio ponderado según el
número de colegiados a los que representan y la obligación
de celebrar una asamblea previa en cada colegio. Los
candidatos al Consejo deberán presentar además un
programa de compromiso, de carácter público, donde
declaren sus propuestas y sus planes de acción de
gobierno durante el periodo, Consideramos también que
los cargos unipersonales del CGCOF deben tener la
restricción de no poder ser reelegidos después de dos
mandatos consecutivos de cuatro años, no tres como se
pretende en el proyecto de Estatutos, y sin poner el contador
a cero en las próximas elecciones.
Octavo. Este proyecto de Estatutos omite muchas de las
observaciones realizadas por los dictámenes del Consejo de
Estado (1.307/2015 y 602/20169), que fue muy crítico con
anteriores textos, observando graves carencias,
singularmente en materia de democracia interna,
representación y transparencia. Por ello, solicitamos que la
Administración impulse, vigile y corrija la modificación de los
Estatutos del CGCOF, para que éste se convierta en lo que
debería ser realmente: una corporación democrática, útil,
transparente y representativa de la profesión
farmacéutica.
Noveno. Por todo lo anteriormente expuesto, exigimos que
se retire el actual proyecto de Estatutos y se abra de
inmediato un proceso de elaboración de unos nuevos
Estatutos del CGCOF, en los que puedan ser oídos y
escuchados los colegiados de toda España. El proyecto de
Estatutos, junto con los reglamentos posteriores, deberían
ser remitidos oficialmente a todos y cada uno de los
colegiados directamente, abriendo un período de estudio y
debate abierto y transparente, lo que también permiten las
nuevas tecnologías de la comunicación.
Décimo. Finalmente, los firmantes pedimos que los poderes
públicos revisen la Ley de Colegios Profesionales de 1974,
anterior a la Constitución Española, y la adapten a la
verdadera democracia, transparencia y participación que
nuestra norma suprema impone para estas instituciones, y
para cualquier ámbito de derecho público.

«La firma del Manifiesto a Favor de un Consejo General Democrático y Transparente, no es solo un acto simbólico; es una exigencia profesional y ética fundamental que responde a la necesidad imperiosa de reformar el Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos de España (CGCOF)».

Enrique Granda, me envía este Manifiesto, donde expone las deficiencias estructurales y operativas del actual proyecto de Estatutos, abogando por una reconfiguración que garantice la democracia, la transparencia y la equidad en una institución que ejerce funciones públicas de vital importancia.

observa Enrique Granda

Y al ser motivo de gran importancia para todo el colectivo, invito a esta Tribuna a cualquiera que quiera opinar, especialmente nuestro Presidente del Consejo.

P.D.- Y al final del mismo artículo escribí «que el Presidente tenga un buen sueldo (para que se presenten los mejores) en caso de que no lo hagan <por vocación>, y que se cree una responsabilidad para que no se les ocurra delinquir». (personalmente añadiría el voto electrónico para mejorar)